La planta y la arena.

Podría decirse que esta es una fotografía de unas plantitas y arena.

Pero creo que es una fotito de plantitas, arena, viento, sol, luz y momentos compartidos entre los dos elementos tangibles, físicos, corpóreos, digamos, la arena y las plantitas.

Podríamos suponer que la vida es lo que dura el cuerpo. Que nuestra vida se define desde que nace hasta que muere. Que todo nuestro universo, todo lo que somos, fuimos y seremos es eso, el cuerpo, el envase, el vehículo.

Pero ¿quién dice “este es mi cuerpo?”.
¿Quién vive aventuras fantásticas o recontra nabas (como las mías), en el momento en que el cuerpo está frito durmiendo?

El crecimiento de esta “plantita” dependerá del lugar en que crezca. Así será en arena pero puede que en un suelo abonado se vea muy diferente. Y esto dependerá de la cantidad de viento que reciba o la cantidad de sol, de agua, del tipo de aire.

Y en tu caso también. Si fueras solo tu cuerpo, deberías crecer y vivir la misma vida en donde estás ahora, en Africa o abajo del agua. Pero no. Dependemos del ambiente también. Eso nos condiciona, nos da forma, nos moldea (sin entrar en Epigenética).

Y por último, la arena hubiera tomado otro dibujo sin la plantita, calculo que hubieran sido todas rayas parejas. Así que no solo la arena modificó a la planta, sino que la planta lo hizo con la arena o, más bien, ambas fueron modificadas por estar ahí, en el mismo momento, en que el viento las moldeaba.

Bien. Somos lo mismo. Seres, influidos por el entorno, que a la vez influimos en el entorno en el que nos movemos. Por eso, se dice que todos somos uno (bah, es más complicado que eso, pero creo que ahí se entiende). Tu mala onda irradia mala onda al resto, tu buena energía, mejora tu alrededor. El calor insoportable no solo te afecta a vos, sino que a vos y al medio en general, igual que un diluvio o lo que fuera que te altere.

Pero nada de todo esto debería alterar al ser, si no hubiéramos comprado que somo solo el envase o que este es lo más importante.

El que se enferma, sufre, tiene calor, es modificado, alterado, masacrado, embolado y controlado, por decir solo algunas cositas, es el cuerpo, el ego, el personaje.

No vos. Salvo, que seas solo eso, el personaje.

Te abrazo.